Tenemos ensayos de envejecimiento acelerado que demuestran que después de exposición prolongada, las probetas no pierden propiedades mecánicas.
Si bien el pigmento se degrada superficialmente, es decir que se opaca, como por ejemplo algunas pinturas, ésto está asociado a la solidez de los pigmentos, y la pieza sometida a ensayo mantiene las propiedades mecánicas iniciales.
Pero esto no sólo está corroborado por los ensayos; por ejemplo, barras de 1 pulgada de diámetro utilizadas para maniobras switches en torres de electricidad en la ciudad de Los Ángeles, retiradas de servicio luego de 40 años, mantuvieron intactas las propiedades mecánicas. Adquirieron de 5 a 7% más de resistencia mecánica.
Esto se explica porque el sistema de resina (poliéster, vinilester, etc.) continúa reticulando en el tiempo.
En el ensayo primario, que es a la salida de máquina, el material está polimerizado en un 95% aproximadamente. Y si obtuvimos esa diferencia luego de 40 años, significa que no perdió ninguna propiedad mecánica.